Zeli: el café soñado en Holanda, hecho realidad en Martínez
De vez en cuando festejan el día del rey y entonces hay stroopwafels, tompouce y appelflappen. El resto del año, los sándwiches generosísimos, su café de especialidad y la pastelería bien casera se ganaron el amor de los vecinos del barrio.
Está, bien luminoso y colorido, en cruz a la icónica plaza 9 de Julio (a la que los vecinos llaman “Plaza de Martínez”, como si fuera la única), en una esquina arbolada y tranquila, que huele curiosamente a hierba y rocío.
Zeli nació el 14 de febrero de 2021, hijo de la pandemia y de Paula Silveyra y su marido holandés Rob Fila quienes, tras 17 años de vivir en Países Bajos, volvieron a la Argentina en 2020 y abrieron este café de especialidad.
Lo llamaron así como deformación del vocablo “gezellig”, que significa acogedor, amable. “Queríamos que cuando viniera alguien, se sintiera como en el living de su casa, por la decoración, la atención, y por supuesto por las cosas ricas que ofrecemos”, nos cuenta Paula, que va de una mesa a otra, saca los pedidos, guía a las dos empleadas, mientras Rob -altísimo y muy poco de español- hace el café y supervisa el servicio.
De vez en cuando en Zeli festejan el día del rey holandés y entonces hay stroopwafels, tompouce y appelflappen. El resto del año, los sándwiches con pan de masa madre generosísimos, su café de especialidad Colombia Orgánico y la pastelería bien casera se ganaron el amor de los vecinos del barrio.
Le pedimos a los dueños y creadores de Zeli que nos indiquen qué deberíamos probar y eligen para nosotros:
-scon de queso con crema, ciboulette y jamón crudo;
-tostado caprese;
-sándwich vegano con hummus y verduras asadas (con pan de masa madre);
-sándwich de salmón, palta, queso crema con ciboulette, pepino y lechuga (con pan de masa madre);
-muffin de arándanos veganos;
-budín carrot;
-alfajores de la casa;
-key lime pie;
-tostadas con palta, huevo y panceta;
-tostados con pan multicereal.
Porque nos gustan los café de barrio y este es uno que ya se ganó el afecto del vecindario; porque está atendido por sus dueños; por su decoración alegre y su atención acogedora; por sus sándwiches veganos, vegetarianos y no, y por su pastelería casera tan rica, seleccionamos a Zeli como un lugar para ir a sentarse y disfrutar.