Afines: la pastelería exquisita que revoluciona La Calabria, en San Isidro
Abrió hace cuatro meses y ya se instaló en las preferencias de los vecinos de esta zona que combina tranquilidad y diseño.
Todo es sutil, delicado y armonioso. Por supuesto, todo es tremendamente exquisito en Afines, la nueva pastelería y brunchería que le cayó en suerte a los vecinos de La Calabria, en San Isidro.
En este barrio que no es joven pero al que llegan cada vez más jóvenes atraídos por sus calles adoquinadas, sus arboledas y edificios de baja altura, empezaron a surgir hace un par de años alguna panadería con propuestas más “modernas”, restaurantes de autor -que la pandemia aniquiló- una cervecería y hamburquesería que ya es furor…
A este desperezar gastronómico se le suma Afines, con su encantador local al que uno va y vuelve no varias veces, sino, pongámosle, cada sábado.
De este sano ejercicio semanal surge la posibilidad de probar sus medialunas de MANTECA con mayúscula porque es como se siente ese ingrediente noble y rico, sus croissants, sus scons dulces o de queso, sus panes de masa madre, sus alfajores, sus chocotortas o pavlovas o tortas de limón.
“Creíamos que La Calabria era un excelente lugar para arrancar, ya que fuimos testigos de su transformación y crecimiento en los últimos años. El barrio aumentó mucho su cantidad de gente y sobre todo jóvenes, que buscan propuestas nuevas”, dice con sonrisa -que se intuye detrás del barbijo- Loli Dodds, una de las creadoras de esta pastelería que desde el vamos, en octubre de 2021, se ganó el corazón y la pasión de los vecinos.
Los otros socios en este viaje son Belén Alegre, Nicolás Marcó y Joaquín Malbran.
Durante el día, en la semana o los fines de semana, cuando explotan de clientes alegres las mesas de la vereda, las de planta baja y las de planta alta, salen las brusquetas de salmón (con queso crema con ciboulette, palta, salmón ahumado y mix de verdes con pickles), las tostadas de pan de masa madre (el que tiene nueces es una invitación a ver el cielo en primera fila), los alfabrownies (una metralleta dulcísima), los fosforitos de jamón y queso (aplaudimos su inclusión en el menú)…
“Encontramos un lugar lindísimo y así fue que juntos arrancamos a cranear AFINES. La idea fue armar algo distinto desde lo estético y en el producto, su presentación y que todo en su conjunto transmita nuestro propósito: el concepto de anfitrión y la alegría por recibirlos”, cuenta Belu.
Lo lograron. La vajilla especialmente diseñada, que da un toque hogareño al local, los tonos pastel en las paredes y el logo, el detalle de la masita que acompaña el café (reproduce el logo de un perro y un gato en armoniosa convivencia), transmiten lo que su slogan define: “Más tiempo juntos”.
“Es un lugar para pasar y llevarte cosas deliciosas para compartir con más amigos y familia. AFINES, porque es para nuestros amigos y para todos los que como nosotros quieren sentirse así con sus propios amigos. AFINES porque sabemos que somos afines a nuestro barrio y una linda amistad acaba de empezar”.
Es una respuesta de Loli, pero podría ser un Manifiesto del lugar.
Se la hacemos difícil a los Afines y les pedimos que hagan ellos un ranking de las delicias que preparan cada día. Y eligieron:
-Alfajorcitos de nuez con dulce de leche
-Scon de queso
-Lingote de chocolate
-Carrot cake
-Avocado toast con huevo soft
-Brownie con helado y salsa de dulce de leche
-Croissant de jamón y queso
-Cookies de avena
-Brusqueta de jamón crudo, queso brie y tomates secos
-Merenguitos de cacao
Ojalá sigamos teniendo la posibilidad de ir cada sábado, o cuando se pueda, a seguir degustando estas delicias hechas con tanto amor que mentiríamos si dijéramos que dan ganas de no comer. Pero sí, de comerlas con devoción.