Slab Cake Bakery: tortas en forma de barras para llevar en Martínez
Un poco escondido, como todo buen tesoro, el local de Moira Sigal ofrece una variedad de 17 sabores de thinny cakes artesanales, premium, sin aditivos ni conservantes. Para llevar al freezer y ser felices poquito a poquito, suave suavecito.
El chocolate Callebaut, el dulce de leche Chimbote, la mano y el gusto exquisito de la pastelera Moira Sigal, ¿qué puede salir mal? ¡Nada! Slab Cake Bakery, en Martínez, abrió hace seis meses y es como una isla del tesoro con sus tortas de chocolate, cacao y dulce de leche, o de peanut y pistacho, y hasta los clásicos chocotorta o carrot cake.
Pero Slab no nació así, de repente, sino con los años, como esas islas que van constituyéndose por sedimentos. Hay que rastrear su origen 20 años atrás, las décadas que lleva Moira dedicada a la pastelería, a la venta, a los eventos y a la capacitación (por su plataforma online moirasigal.com ya pasaron miles de alumnos).
Con ese bagaje a cuestas y con las ganas mundiales que trajo la pandemia de “hacer otra cosa”, esta pastelera tan inquieta y creativa pensó y probó durante dos años este formato de rectángulos breves, elegantes y sabrosos en el que convergieron recetas ya probadas durante mucho tiempo.
“La idea era que no necesitas el tortón de 20 centímetros de altura para darte el gusto de algo rico, premium y conveniente. Ese es el mantra de Slabcake. Porque nuestros Slabs se apilan en el freezer para ese momento de alegría que todos buscamos. Ese gustito delante de Netflix o de un postre para llevar a la casa de alguien”, explica Moira, una celebridad en redes sociales gracias a sus cursos de capacitación y sus eventos.
“Cero colorantes, cero aditivos, cero artificial. Un volver a la pastelería esencial, de super calidad”, nos dice mientras vierte una catarata de chocolate de frambuesa francés sobre una base chocolatosa, que después recibe un baño de nibs de cacao y sal. Si el equilibrio es la perfección, ¡EUREKA!
Vamos a preguntarle a Moira qué deberíamos probar en primera instancia, y de los 17 sabores de Slab, nos guía primero por estas thinny cakes en formato barra:
-Valentin: una cruza de marquise con dulce de leche, chocolate con leche Belga, cacao, chocolate de frambuesa frances, nibs de cacao y sal;
-Caramelia: la base del anterior, pero con caramelo salado;
-Notting Hill: la misma base con peanut y pistacho;
-Carrot Cake: con canela orgánica;
-Lemon Pie: los hacen rallando y exprimiendo cientos de limones, nada de esencia artificial;
-Chocotorta: con chocolate belga y dulce de leche Chimbote.
Porque sus creaciones premium ni siquiera dialogan con la pérdida de calidad; porque descubrió que somos muchos los que necesitamos un verdadero postre que no sea tamaño cuadri ni tortón; porque sus sabores equilibrados van tocando delicadamente cada tecla de nuestro paladar; por la valentía de esta apuesta tan creativa como lograda, decimos que Slab Cake Bakery es una propuesta que prestigia la Zona Norte.